Cambiando de tercio completamente, os presento una "fantasmada".
Son unos móviles, de cuatro elementos, que me encargaron.
No lo puedo negar, toda la vida me han gustado los móviles. Es un elemento grácil y relajante a la vista; esos movimientos suaves y tranquilos... un remanso de paz en esta ajetreada vida.
Están hechos con paper-clay (es decir, una mezcla hecha con papel y barro, consiguiendo piezas mucho menos pesadas). Este trabajo representaba un reto, ya que debían ir esmaltados completamente, es decir, que tenían que cocerse colgando, sin tocar nada. Ciertamente, me he peleado mucho con ellos...
Haciendo inventillos y gastando paciencia, lo conseguí.
Este es el momento antes de cerrar el horno. (Nunca tardé tanto en cargar un horno...)
Después, gastando más paciencia todavía, llegó la hora de montar cada móvil, a base de sedal y nudos.
Los he creado jugando con cuatro formas base y cuatro colores. De esta manera, los diez móviles son homogéneos y únicos a la vez.
¡Menuda fantasmada!