Todo empezó cuando se rompió mi vieja jabonera...
La idea es que el agua con jabón escurra al interior del lavabo, de forma que no se quede encharcado ni deje manchas en la encimera del mismo.
Están hechas en barro refractario blanco y cocidas a 1260ºC, de manera que son piezas resistentes al uso cotidiano.
Cada una es distinta (y única)...
Las hay, básicamente, de personas y animales, aunque alguna la he dejado también sin figura.
Espero que os hayan gustado.